Nota del Editor: Una nota alarmista que ha circulado desde hace años esta invadiendo de nuevo las computadoras con informaciones sobre productos de higiene femenina, algunas mujeres estan alarmadas por el contenido de la información de marras, es la misma mentira que hemos desmentido desde siempre. Para orientar a nuestras lectoras publicamos el siguiente reportaje del Portal de las Mujeres de Chile, hay en la internet miles como este abr el buscado de GOOGLE o YAHOO, y escriba el nombre de una marca de tampones y toallas sanitarias o simplemente las palabras tampones y toallas sanitarias femeninas y podrá encontrar abundante información al respecto. Disfrutenla eh...
Una cadena de e-mails habla de nocivos efectos Toallas higiénicas: Protección ¿a toda prueba?Imposible que una mujer en edad reproductiva pueda hacerle el quite a estos apósitos femeninos. La oferta es inmensa, tienen hasta fecha de vencimiento, y pese a que son un producto de consumo masivo, desde el punto de vista sanitario se encuentra en “tierra de nadie”.
PorDaniela Donat
Por estos días comprar toallas higiénicas está lejos de ser un “juego de niñas”. La diversidad es tan amplia que entre las “ultra”, "con alas", "nocturnas" o "con malla sec" la decisión se dificulta y una mujer bien puede pasar un par de minutos intentando decidir cuál es la más conveniente o tratando incluso de dar con la que usa habitualmente.Y es que en los últimos 40 años estos apósitos han tenido una vertiginosa evolución. Los paños de tela dieron paso a las toallas de algodón solo, al que se sumó la gasa y después una lámina plástica suelta en la parte inferior; hasta llegar a las ultra delgadas y súper absorbentes. Detrás de las modernas denominaciones no hay más que distintos porcentajes de celulosa, polímeros absorbentes, polietileno, adhesivos y gel, que aseguran distintos niveles de absorción, comodidad y seguridad. Pero eso no es todo, porque la tecnología también se ha encargado de sembrar algunas dudas. Desde hace ya unos años circula un correo electrónico que alerta sobre lo nocivas que pueden llegar a ser ciertas toallas higiénicas y tampones. Asbesto, dioxinas fibras de rayón serían los culpables de provocar sangramiento excesivo, y por tanto mayor consumo, en el caso del primero; mutaciones celulares y cáncer de útero las consecuencias del segundo y; el síndrome de shock tóxico en el caso del rayón empleado en la fabricación de tampones.
¿Qué hay de cierto? Alertados por esta cadena de mails hace un tiempo que el Servicio Nacional del Consumidor (Sernac), realizó un sondeo para determinar la veracidad de esa información. Basados en investigaciones realizadas por el FDA norteamericano, el Sernac estimó que “estos productos no representan riesgos para la salud de quienes los utilizan”, siempre que se haga de forma adecuada y siguiendo las instrucciones que contienen los envases. Y es que el organismo norteamericano ha difundido a través de internet una aclaración que indica que los tampones que se venden actualmente no contienen asbesto y que no se han encontrado en ellos niveles detectables de dioxina. En cuanto a las preocupaciones sobre el uso de rayón y su relación con el Síndrome de Shock Tóxico, habla de un hipotético riesgo debido al uso de tampones de muy alta absorbencia. Por tal motivo, los fabricantes están obligados a informar en los envases el tipo de absorbencia con los términos de “junior”, “regular”, “super” y “super plus”. Teniendo en cuenta que está prohibido usar asbesto en la elaboración de cualquier producto, el ginecólogo del Hospital Clínico de la Universidad Católica, Jorge Carvajal, califica sólo como un hoax (engaño) el mail que circula por internet. Indica tajante que no existen antecedentes en la literatura médica que hagan alusión a la relación entre toallas higiénicas, asbesto y el cáncer uterino. El ginecólogo explica que no ha detectado problemas de largo plazo relacionados con el uso de toallas. Acota que las que contienen ciertos perfumes pueden ocasionar irritación en la zona vulvar, que lo mismo ocurre con las toallas que contienen más plástico y que algunas pacientes han detectado irritación en la ingle producto del roce que se genera con las “alas”. Por su parte, la subdirectora de la Escuela de Obstetricia de la Universidad de Santiago, Viviana Gysling, explica que no es menor el número de pacientes –principalmente jovencitas- que consultan porque presentan un rechazo a ciertas toallas o protectores diarios. Reacciones alérgicas con lesiones locales, ardor y prurito intenso son algunas de las manifestaciones. A su juicio, las causas estarían en el tipo de toalla que estén usando, de los hábitos de higiene y de un inadecuado recambio. Para evitar cualquier inconveniente los especialistas recomiendan utilizar toallas que no tengan aspecto de ser muy plásticas, ojalá sin perfume, que las cambien con frecuencia, y que prefieran estos apósitos antes que los tampones.
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