jueves, marzo 29, 2007

Plan de alimentación para dejar de fumar


De Eroski, Portal del consumidor europeo

Limpiar el organismo


¿Cómo?
El humo del tabaco contiene nicotina, la sustancia más adictiva, y otros compuestos venenosos que intoxican el organismo. Por ello hay que tomar:

Más agua: Beber un vaso de agua cada vez que aparezcan ganas de fumar. Como se bebe más líquido, se orina más y se elimina antes los tóxicos del tabaco.
Verduras y frutas diuréticas: apio, borraja, lechuga, espárragos, ajo y cebolla. Pera y manzana.
Plantas que ayudan a orinar más: cola de caballo y diente de león

Aprender a comer sano

¿Cómo?
Se saborea mejor lo que se come, lo que puede conducir a comer más de lo habitual.

Plan de menús semanal y comprar sólo lo que aparece en el menú.
Alimentos indispensables en el menú diario: 3 frutas frescas, 2 vasos de leche o equivalentes -yogur y queso desnatado, cuajada-, una ensalada, algo de verdura y 8 vasos de agua.
Cuando apetece algo dulce: chocolate para momentos muy especiales -no engañarse-, 2 biscotes "pintados" de nocilla o mermelada, descafeinado con leche y sacarina, zumos, horchata y refrescos light.

Combatir la ansiedad

¿Cómo?
El objetivo es contrarrestar la mayor producción de adrenalina, que explica el nerviosismo y la ansiedad por comer más.

Comer 5 veces al día y retrasar unos minutos la comida desde el momento que se sienta hambre.
Alimentos con nutrientes relajantes: puñado de frutos secos, piña natural, plátano, copos de avena con leche, ensalada de lechuga.
Alimentos bajos en calorías para los momentos de crisis: chicles y caramelos sin azúcar, regaliz de palo, fresas, gajos de naranja, zanahoria, infusiones, yogures desnatados, refrescos light...
Prescindir de los excitantes: café, té, refrescos de cola... Resultan contraproducentes, y más si se toman ansiolíticos

Sortear obstáculos

¿Cómo?
Hay momentos que se asocian inevitablemente con el cigarrillo. Aunque también hay situaciones en las que se tiene la suficiente capacidad como para no fumar, por ejemplo, durante las 2 horas que dura el cine. Esto pone en evidencia que si se quiere, se pueden superar todos los obstáculos.

Después de comer: Lavarse los dientes y romper con la rutina; llenar los momentos de ocio con alguna afición tal vez descuidada.
Después del café: Prescindir de este excitante, o sustituirlo por infusiones relajantes

---

Volver al directorio:

http://moises-iturbides.blogspot.com


Alimentación y tabaquismo


Dejar de fumar: Engordar no es excusa

El peso aumenta en los cuatro primeros meses sin tabaco entre tres y cuatro kilos, pero no suponen ningún riesgo para la salud, porque se perderán cuando la ansiedad y la dependencia se hayan superado

De Eroski, Portal del consumidor europeo
.
Los kilos de más no son excusa para dejar de fumar. Aunque la comunidad médica ha constatado que el abandono del tabaquismo genera un sobrepeso, también han comprobado que este aumento es transitorio y no supone riesgo alguno para la salud. La razón: el peso que se gana durante los cuatro primeros meses, entre dos y cuatro kilos, se puede perder con la misma facilidad, una vez que haya desaparecido la ansiedad y superado la dependencia. No obstante, es muy importante no cambiar un mal hábito como dejar de fumar por otro muy poco saludable: comer mucho y mal. Para ello, el seguimiento de una correcta conducta alimentaria puede ser un gran aliado para los ex fumadores.

En diciembre de 2006, el Comité Nacional para la Prevención del Tabaquismo hizo publica la 'Encuesta sobre conocimientos, actitudes, creencias y conductas en relación al consumo de tabaco', en la que se constató que una de cada cuatro mujeres y un 5,5% de los hombres no dejaban de fumar por el miedo a engordar. Es verdad que lo habitual es que una persona que dice adiós al tabaco engorda los primeros meses, como señala la Escuela para Dejar de Fumar, entre dos y cuatro kilos. Es fundamental que asuman este hecho y no lo infravaloren porque puede convertirse en una excusa para volver a tener un cigarrillo entre los labios. Pero esos kilos de más no deben ser motivo de preocupación porque no se originan como consecuencia de unos malos hábitos alimenticios, sino de un desorden pasajero en las comidas, originado principalmente por la ansiedad de dejar el tabaco.

La clave, tras los cuatro primeros meses

Ahora bien, seguir ganando peso cuando se ha superado la fase física de dependencia -los cuatro primeros meses- que origina la ansiedad, sí puede convertirse en un problema de salud de primer orden. El peligro es cambiar un mal hábito (fumar) por otro mal hábito (comer mal, comer demasiado).Esto explica lo injustificable: muchas personas culpan el "dejar de fumar" a los 12-15 kilos o más que han engordado, y eso no es cierto. Únicamente los cuatro primeros kilos responden a un cambio metabólico acompañado de una fase de ansiedad en la que algunos alimentos pueden funcionar como "ansiolíticos". Los siguientes, no.

La comida, una aliada, no una trampa

Una persona que ha sido capaz de dejar una droga tan adictiva como el tabaco, con todo el esfuerzo que supone, no puede permitirse caer en una mala alimentación y transformar la ingesta de patatas fritas o chocolate en una costumbre que sustituya al cigarro. La comida debe ser una aliada, no una trampa. Pero, ¿es posible conseguir el doble objetivo -dejar de fumar y evitar el sobrepeso- revisando los hábitos alimentarios?

Dejar el tabaco genera ansiedad, que se traduce en mal humor, nervios y sensibilidad extrema, incluso, malestar físico y taquicardias. Por lo general, a todos estos síntomas, que se prolongan por espacio de cuatro meses, se les une otro: hacer frente a la angustia que se siente al comer de manera desordenada y demasiada cantidad, en especial alimentos grasos y dulces. Contra esta tendencia, el plan de alimentación se basa en tres pilares: ayudar a limpiar al organismo de las toxinas del tabaco, calmar la ansiedad para superar la abstinencia de la nicotina y aprender a comer sano para mantenerse en un peso saludable, no engordar más de cuatro kilos y, algo muy importante, no comenzar una dieta de adelgazamiento hasta pasados seis meses desde que se abandonó el tabaco. Ése será el momento de volver al peso anterior.

Continuará mañana

---

Volver al directorio:

http://moises-iturbides.blogspot.com


Aprender a comer con los colores

Identificar con un color cada grupo de alimentos puede ayudar a los niños a llevar una dieta variada y equilibrada











  • Energética, en amarillo: alimentos ricos en grasas e hidratos de carbono
  • Plástica o estructural, en rojo: alimentos ricos en proteínas
  • Reguladora, en verde: alimentos ricos en vitaminas y minerales

Hay algunos grupos de alimentos en el mercado especialmente rechazados por los niños. Así lo demuestra el Estudio Enkid, un trabajo realizado entre los años 1998 y 2000 sobre los hábitos alimentarios y el consumo de alimentos en la población infantil y juvenil española. Entre las conclusiones de este estudio, se observa que los alimentos más rechazados por este colectivo son, en primer lugar, las verduras, seguidas de las legumbres y los pescados respectivamente. Este rechazo aumenta conforme avanza la edad hasta la adolescencia, por lo que se debe hacer un gran hincapié en el fomento del consumo de estos alimentos. El rechazo hacia las frutas, a diferencia de los anteriores, disminuye con la edad.

A la vista de estos resultados, los padres intentan, cada vez más, cuidar la salud de sus hijos y prevenir enfermedades que pueden aparecer en la edad adulta. Para ello, es importante educar a los niños y mostrarles los beneficios que les puede aportar una dieta variada y equilibrada.

Un color para cada función

El organismo necesita más de cuarenta nutrientes para mantenerse sano. Como ningún alimento los contiene todos a la vez, la solución está en comer variado para que cada uno aporte su calidad nutritiva concreta. Según los nutrientes que contiene cada alimento y la función que desarrollan en el organismo se forman varios grupos.

Así lo establece la Sociedad Española de Dietética y Ciencias de la Alimentación (SEDCA), mediante un recurso didáctico cada vez más extendido como es la rueda de los alimentos, promovida en España desde los años 70 y 80 a través del programa EDALNU del Ministerio de Sanidad. Desde entonces, las recomendaciones alimentarias han cambiado, y esto ha obligado a actualizar el contenido de la rueda.

Este recurso didáctico enseña a los niños a comprender la importancia de comer de todo, ya que en una sola imagen, en varios colores, se reflejan los diferentes grupos de alimentos y las funciones que desempeña cada uno de ellos:

Además de estos colores, los profesionales de la alimentación utilizan también el color azul para diferenciar los lácteos de otros alimentos proteicos y el marrón claro para los farináceos, tal y como se observa en el cuadro.

Un arco iris en el plato

La comida entra por los ojos, y más cuando se trata de niños. Tanto es así que una cena compuesta por un puré de patata, una tortilla francesa y un flan no resulta atractiva, ya que el color amarillento y la consistencia blanda es la tónica general de este menú. En cambio, si se combinan todos los grupos de alimentos se obtienen platos muy coloridos, con una presencia muy agradable que anima a probarlo.

Así, cuanta más variedad de colores tenga cada plato mayor será el aporte nutritivo de cada uno de ellos. De esta forma, se asegura que en la dieta se incluyan todos los grupos de alimentos.

---

Volver al directorio:

http://moises-iturbides.blogspot.com


domingo, marzo 18, 2007

Podrían frenar la metástasis con la combinación de fármacos



-De Salta Internacional, Ar.


-SERVICIOS GOOGLE PARA BLOGGERS-

Según el científico español, Juan Massagui, es posible desactivar los genes que causan la actividad metastásica. Existen combinaciones celulares que causan metástasis en aquellas células que tienen tejido propicio.


El científico español Joan Massagui, una de las principales autoridades mundiales sobre el cáncer, dijo ayer que es posible frenar la metástasis mediante la combinación de fármacos escogidos para cada tipo.

Según sus investigaciones, distintas combinaciones celulares causan metástasis diferenciadas, ya que cada célula tiene una función específica y "escoge el tejido más propicio para colonizarlo".

Es por ello que la desactivación de los genes de estas células mediadores de metástasis, mediante la utilización de fármacos especialmente dirigidos a este fin, permite frenar la actividad metastásica.

Así lo expuso ayer Massagui en Bilbao (Norte de España), donde pronunció la conferencia inaugural del ciclo "Envejecimiento y cáncer".
El investigador catalán, director del programa de Genética y Biología del Cáncer en el Memorial Sloan-Kettering Cáncer Centre (Nueva York), explicó que sus investigaciones en este campo -que empezó hace cuatro años- partieron de la premisa de que cada metástasis "sigue pautas definidas".

Los órganos tomados

Comprobó, de este modo, que un tumor en una mama genera metástasis en hueso, pulmón, cerebro e hígado; un cáncer de pulmón la desarrolla en cerebro y hueso; uno de colón en hígado y pulmón; uno de próstata en hueso; y uno de sarcoma en pulmón.
De ahí, dedujo que un tumor contiene "entidades metastáticas que representan especies distintas, que lo son porque colonizaron órganos distintos".

La siguiente fase de su investigación se centró en "saber qué hace diferentes a estas células" y determinar "qué gen se activa en una especie y cual en otra".
De esta forma, su equipo comprobó que "los genes hiperactivados en la metástasis de pulmón no lo están en la de hueso".

Invadiendo tejidos

La metástasis presenta diferentes manifestaciones que en conjunto originan un problema médico grave. Durante este proceso las células pierden su localización específica dirigiéndose a los tejidos y órganos próximos, desarrollando la capacidad de invadir otros tejidos, adquiriendo la posibilidad de crecer en localizaciones o ambientes diferentes a aquel sitio donde se originaron.

Esto hace que las metástasis dependiendo del tumor de origen y del sitio en el que se localizan se clasifiquen en:
Adyacentes o invasivas: cuando afectan a tejidos y órganos que se encuentran junto al sitio de origen.

Cercanas, próximas o regionales: cuando afectan a los ganglios linfáticos que rodean al tumor de origen.
Distantes o lejanas: cuando afectan a ganglios linfáticos tejidos u órganos separados o distantes del tumor de origen.

Estudios en laboratorios

Estos estudios, efectuados con tumores mamarios en ratones, le permitieron afirmar que, "según que tipo de genes componían un tumor, se podía prever si desembocaría en metástasis y en que órgano lo haría".

En ese momento, el investigador español se dispuso a determinar la función de cada uno de los genes de un tumor metastático y para ello aisló a los cuatro genes que mostraban una mayor actividad y procedió a "apagarlos" mediante una nueva técnica.
Después, se implantó en un ratón los cuatro genes sospechosos, que generaron un tumor con metástasis.

La parte final del experimento se centró en la medicación de los ratones con dos fármacos "que ya existen y se utilizan para otros usos clínicos" y que actúan sobre los cuatro genes metastáticos logrando su desactivación.

Por separado son ineficaces

Aunque la utilización de los fármacos por separado fue ineficaz, al usarlos conjuntamente se logró frenar la colonización.

A juicio de Massagui, estos experimentos permiten afirmar que es posible frenar la metástasis de cáncer mediante combinaciones personalizadas de fármacos para cada tipo de tumor.

No obstante, antes será necesario aislar los células metastáticas en cada tipo de metástasis, identificar los genes que activos dentro de esa unidad y hallar la mezcla farmacológica adecuada.

Tratamiento con tamoxifeno

Un estudio promovido por la asociación británica para la investigación del cáncer descubrió que los efectos beneficiosos del tamoxifeno, medicamento utilizado para tratar los tumores de mama, se prolongan cinco años después de haber dejado de tomarlo.
Este informe, que publica en su último número la revista "Journal of the National Cáncer Institute", explica además que los efectos secundarios de la ingesta del tamoxifeno, como los coágulos de sangre, desaparecen en ese período de tiempo en el que, aunque no se tome, el medicamento continúa actuando.
Este hallazgo proviene de un estudio internacional para la intervención sobre el cáncer de mama (IBIS), que ya en 2002 constató que el tamoxifeno, usado también como fármaco preventivo, puede reducir en casi un tercio las probabilidades de desarrollar este tipo de tumor entre la población femenina con mayor riesgo.

Voluntarios

En el IBIS participaron más de 7.000 mujeres con algún antecedente de este tipo de tumor en el historial médico familiar.
La proporción de mujeres que desarrollaron la enfermedad fue un 27 por ciento menor entre las que habían tomado 20 miligramos diarios de tamoxifeno durante cinco años que entre las que habían recibido el placebo.
Sin embargo, aquellas pacientes que se sometieron al tratamiento y padecieron trombosis o embolias pulmonares como consecuencia de los efectos secundarios del tamoxifeno doblaron en número a las que no tomaron el medicamento.

Prevención

Los casos de cáncer de endometrio y otras enfermedades ginecológicas también aumentaron con la ingesta del tamoxifeno, efectos secundarios que, según los investigadores, cesan en los cinco años posteriores al tratamiento.
"Estudios anteriores mostraron que el tamoxifeno reduce los riesgos de desarrollar el cáncer de mama durante el tratamiento, pero esta es la primera vez que hay una clara evidencia de que los efectos secundarios desaparecen después del tratamiento", comenta el profesor Tony Howell, director de esta investigación.

Larga data

El tamoxifeno, que se utilizó durante más de 20 años en el tratamiento de pacientes con cáncer avanzado de seno, es un medicamento en forma de píldora que interfiere con la actividad del estrógeno.
Se usa como terapia adicional después del tratamiento primario para cáncer de mama en su etapa precoz, y como prevención para las mujeres que tienen un riesgo elevado de desarrollar ese tipo de tumores.
Este medicamento se utiliza también para tratar a hombres con este mismo tipo de cáncer.
Actualmente, los investigadores encargados del IBIS están seleccionando a mujeres posmenopáusicas para una segunda parte del estudio en la que analizar si el medicamento anastrozole tiene menos efectos secundarios que el tamoxifeno.

---
Volver al directorio:

http://moises-iturbides.blogspot.com

Terapia genética para enfermedades del cerebro

-De La Nueva Provincia, Ar.
-SERVICIOS GOOGLE PARA BLOGGERS-
---
Los males de Alzheimer o Parkinson pueden ser tratados con un método adaptado al perfil de cada paciente. "El 80 por ciento del efecto de un medicamento depende del genoma", sostiene el científico español Ramón Cacabelos.
VIENA (EFE) -- "Un tratamiento eficiente de las enfermedades degenerativas del cerebro, como el mal de Alzheimer, requiere un planteamiento nuevo basado en la genética, ya que las terapias hasta ahora desarrolladas apenas surten efecto", declaró ayer en Viena el científico español Ramón Cacabelos.

"El 80 por ciento del efecto terapéutico de un medicamento depende del genoma", explicó el director del Centro de Investigación Biomédica EuroEspes de Bergondo (La Coruña), quien participó en la VIII Conferencia Internacional sobre Alzheimer y Parkinson, que en la víspera concluyó en Salzburgo.

El científico recordó que ese hecho, hasta ahora, no ha sido tenido debidamente en cuenta.

Según Cacabelos, no tiene sentido comenzar una terapia contra el Alzheimer cuando los síntomas se han presentado, porque en ese momento han muerto ya miles de millones de células en el cerebro.

El investigador considera necesario desarrollar una estrategia preventiva para enfrentarse al verdadero comienzo de la enfermedad, pues un paciente que muestra síntomas de degeneración cerebral a los 60 años, en realidad ha estado enfermo ya desde hace unos 30.
Reitero que el 80 por ciento de la respuesta farmacológica de los medicamentos depende de nuestro genoma y que, además, el gen CYP2D6 --responsable del metabolismo de más del 30 por ciento de los medicamentos que actúan sobre el cerebro--, en la población caucásica europea está mutado en un 15 a 20 por ciento.

"Ello quiere decir que cuando se administran esos medicamentos, en un 15 a 20 por ciento de los pacientes se obtiene un efecto tóxico o resultan ineficaces".
Cacabelos subrayó que los fármacos existentes son ya productos antiguos, basados a menudo en planteamientos equivocados, que no actúan sobre las verdaderas causas de la enfermedad, sino que tratan los síntomas, sin considerar el decisivo problema genómico.

El especialista pone sus esperanzas en la farmacogenómica, según dijo, "la estrategia más avanzada que hoy existe en el mundo" para tratar este tipo de dolencias, y que consiste en desarrollar medicamentos y estrategias adaptados al perfil del genoma individual de las personas.

En los próximos 15 años urge desarrollar planes de tratamiento estratégicos para lo que el Centro de Investigación Biomédica EuroEspes, que preside Cacabelos, se ha convertido en punto de referencia, junto a unos pocos institutos en países como Estados Unidos y Japón.

Proyección.
Este nuevo planteamiento terapéutico no sólo vale para los males de Parkinson o Alzheimer, sino también para una serie de otras enfermedades degenerativas del cerebro, como la apoplejía o la enfermedad de Huntington.
---